miércoles, 30 de octubre de 2013



EL BAÑO DEL CABALLLO 1909
EL BAÑO DEL CABALLO
óleo sobre lienzo pintado a mano 
Museo Sorolla Madrid



El asunto es, como siempre un pretexto para recoger la plenitud solar sobre la piel húmeda del chico y del animal, logrando una vez más demostrar sus facultades portentosas para  atrapar la fugacidad de la luz y transcribirla, sin desmayos ni vacilaciones , al enorme lienzo. Las figuras en tamaño natural, son  solamente dos , que asumen el protagonismo del argumento del cuadro: un muchacho que va semidesnudo que saca del mar -conducidopor el ronzal- a un gran caballo blanco. La cabeza del animal , realmente impactante en su sabia resolución , cubre la tela hasta  casi sin rozar su parte superior , en un procedimiento ya utilizado anteriormente por el pintor y que tiene mucho que ver con el encuadre fotográfico .

EL BALANDRITO 1909
óleo sobre lienzo 100x 110
Museo de Sorolla, Madrid 

En los laterales y al fondo del horizonte, se dejan ver, a penas esbozados en pura mancha , la somera inclinación coloristas de unas barcas tiradas por unos bueyes. La simplificación del matiz - una entonación grisácea a base de ocre y verde -es pareja a la facilidad de la mancha ; luminosa sin blancos . El cuerpo , más trabajado , aunque no se note , es un magnífico estudio de  calidades , luces y reflejos. 

El desnudo del muchacho , de una limpieza absoluta , está logrado con firmes y amplias pinceladas de cadmios-naranjas, en los que resaltan los toques blancos del brillo cegador del sol. En primer término se extienden las sombras violetas y azules, transparentes y nítidas , al reflejarse el grupo sobre la arena mojada. En contraste con la enorme mole del caballo , con una materialidad casi táctil , en los laterales y en los limites del horizonte . Sorolla insinúa fragílismos y delicados reflejos a pasar casi etéreo de dos embarcaciones que surcan las aguas :fondo que interviene como parte viva,no como mero telón.

La herida del pie 1909
óleo sobre lienzo 109x99cm
Museo J, Paul Getty , Santa Mónica , California




La composición llana de equilibrio y  ritmo, has sabido agrupar , de forma sencilla , los componentes del lienzo,  disponiendo las figuras en los planos que le dan más valor , sabiendo " cortarlas " para aumentar la expresividad

.Aunque no es un cuadro realmente " movido ", el artista , sin embargo, vuelve a estar preocupado por el aspecto dinámico: tanto el niño como el animal están andando  sensación que subraya por medio de las extremidades de los dos personajes:la pata delantera del caballo y la media planta  del pie trasero del chico, se encuentran levantadas, congeladas antes de pisar  la arena de la playa.

Curiosamente , tanto la pata del paquidermo como el pie del chaval , están situados en la misma linea y ocupan el verdadero centro "estratégico "de la composición. Una de las grandes cualidades del valenciano era- logrado su camino- perseverar en él, avanzando siempre en linea recta.

NIÑO CON MAR PLATEADO 1909
óleo sobre lienzo 98x110cm
Colección José Fanjul


Nada ni nadie le hacían desviarse de su verdad integral, de la aprehensión del sol ,del agua y del aire "in situ "para no perderse nada del "espectáculo "completo: luz directa, luz reflejada, sombras transparentes , color matiz, color reflejo...que le hace llegar hasta casi lo imposible : el color -luz-hiriente,esos puntos cegadores del sol sobre la superficie de la piel y del mar.

Mercedes Tamara 
30-10-2013



viernes, 18 de octubre de 2013

BUSCANDO MARISCO JOAQUIN SOROLLA

BUSCANDO MARISCO 

Buscando marisco
´´oleo sobre lienzo 64x 96 cm
Madrid , Coleccion Santander






Tras haber  terminado en Ayamonte el último panel de su Visión de España , Sorolla regresó a Madrid desde donde viajó a finales de julio a Valencia . De allí pasó a Mallorca que le pareció  " interesante pero demasiado muerto " , de modo que, según comunicó a su amigo Pedro Gil decidió trasladarse a Ibiza. Allí acompañado por su familia , su discípulo Santiago Martinez y el pintor Ernst Ziess, permaneció hasta el 25 de septiembre.

La belleza de las calas de la isla le movió a pintar el mar entre las rocas, como había hecho a  partir de 1905 en Jávea. Recuperó entonces los motivos de niños buscando mariscos que  había pintado en aquella ocasión, así, como los puntos de vista en picado . que hacen sumergirse 
la mirada en el motivo. El efecto de los cuerpos desnudos entre las peñas es también similar  al que puede verse en algunos de sus cuadros con temas con temas de baño de aquel momento, pero en la obra de 1919 las rocas asumen un protagonismo mayor que el agua , a diferencia de lo que ocurría en la pintura de Jávea.


Sorolla había pintado el arriesgado descenso de un muchacho desnudo en busca de mariscos por la pared rocosa del acantilado con el mar al fondo, preludio del punto de vista vertiginoso similar al de Los contrabandistas . En este cuadro, en cambio, el artista representó los dos desnudos infantiles en el centro de una oquedad, rodeado por completo de grandes peñas que parecen ofrecerle protección




Niño entre espuma 1900
óleo sobre lienzo 60 x 89 cm
Colección particular




En el mar próximo , al sol, la anatomía aparece rodeada con detalle en el expresivo dibujo  de contorno, especialmente en la pelvis, cuyos músculos muestran el esfuerzo realizado , mientras que la resolución del cuerpo del más alejado es mucho más sumaria . El modo  de representar las rocas, a partir de pinceladas muy libres en distintas direcciones , crea un intenso dinamismo. Sus variaciones de color, en una amplia gama de tonos ocres, rojizos, anaranjados, amarillos y blancos con toques malvas, grises y azulados , son consecuencia  de las diversas incidencias de la luz en relación con la orientación de las rocas.

La variedad de tonos cálidos , en oposición al intenso y compacto azul oscuro del mar a la  izquierda del borde superior , convierte el resguardado ámbito de las rocas en un verdadero  tesoro cromático, en cuyo interior las aguas resplandecen 
con luz coloreada.                 


 Mercedes Tamara 
18-10-2013



Bibliografía : Sorolla, Begoña Torres González , Edic Libsa

jueves, 17 de octubre de 2013

CLOTILDE CON TRAJE DE NOCHE JOAQUIN SOROLLA

CLOTILDE CON TRAJE DE NOCHE 1911


Clotilde con traje de noche
óleo sobre lienzo 150 x 105 cm 
Museo Sorolla , Madrid


Estos retratos de Clotilde , su mujer, tienen el poder de seducirnos desde el primer momento; y no se trata solamente de la expresión del rostro , ni de los elegantes detalles , sino de cómo está resuelto el conjunto en general.Sabe capturar el glamour y la elegancia característica de la sociedad de moda , pero también expresa a través de su penetrante mirada , la personalidad individual de su más querida modelo.

Aparece sola, segura de su posición , de su encanto y estatus . Refleja la sensibilidad estética de fin de siglo y su gusto por lo refinado y enigmático . Después del soberbio  Clotilde con traje negro, de 1906, vuelve aceptar a su mujer vestida con traje de noche -blanco o negro-en dos magníficos retratos.


Clotilde sentada en un sofá
1910 , óleo sobre lienzo 180 110 cm
Museo Sorolla, Madrid






En Clotide sentada en un sofá , la inusual posición de la figura , ofrece a la pintura su propia intensidad emocional . Parece mirar por encima de nosotros ,como si se dispusiera a saludar a algún amigo que acabara de entrar en la habitación . Su atractiva mirada se dirige al espectador, estableciendo cierta complicidad con él.

El rostro está captado con justeza de trazos ,directo y seguro y, sobre todo, es muy atractivo el modo con que está trazado el vestido , pintado directamente sobre la preparación del lienzo , para lograr las calidades de las transparencias de la gasa , lo que demuestra una excepcional habilidad para pintar sobre blanco, creando maravillosos y brillantes efectos . La delicadeza de la tela parece también reflejar el glamour que envuelve a la elegante dama .


A través del ejemplo de Sargent, nuestro artista aprende también de otros importantísimos maestros de la escuela inglesa del siglo XVIII,como Joshua Reynolds y Thomas Gainsborough, influencia que se refleja , en este caso , además en la pose a la " gran manera  en el uso de una paleta muy elegante a base de perlados, rosados y blancos.

Sorolla establece relación con los que fueron considerados como los grandes maestros del género en su época ; además de Sargent, conoció a Giovanni Boldini, Anders Zörn, Leon Bonnar y, seguramente a Antonio de Gándara , Paul César Helleu etc.

Por lo que respecta a nuestro país , el pintor español que más éxito internacional tuvo por sus elegantes retratos de mujeres -generalmente sentada en sillones -había sido Federico de Madrazo, que supo subrayar en ellos el sentido aristocrático y cosmpolita como se puede ver en sus obras La condesa de Vilches ( Museo del Prado, Madrid ) La condesa de Siruela ( colección particular ) ambas pintadas en 1873.

Todavía en la época de Sorolla , permanecía el impacto que había supuesto estos retratos -sobre todo- por lo que se refería a la clientela americana -dándose al curioso caso de una dama que quería que Sorolla retratase " a la manera de Madrazo ".
Mariá con sombrero 1910
óleo sobre lienzo 40x 80 cm
Colección particular.






En Clotilde con traje negro , contribuye también a su particular éxito , los fluidos brochazos , que parecen capturar la vitalidad de la mujer y su nerviosa elegancia . La dama está sentada en un sillón y, aunque se muestra natural , no se encuentra del todo relajada .Parece esperar a alguien que venga a buscarla para ir al teatro , a una fiesta o a una reunión de salón. Este imperceptible envaramiento -que notábamos ya en el retrato anterior -debía ser síntoma de distinción , porque también fue muy común en las efigies de la alta sociedad llevadas a cabo por otros pintores del momento.


El retrato de Clotide son sombrero está dispuesto en vertical para dar mayor empaque;destaca la amplia utilización del negro en la ropa , que contrasta con las carnaciones muy nacaradas y blancas , y el brillante toque de color amarillo en las flores del sombrero En el retrato de María, donde dominan las entonaciones oscuras con ocres y rojos , volvemos a vislumbrar un cuadro al fondo , en la penumbra de una estancia.

Ambos se caracterizan por el uso del color negro , un negro aterciopelado , prohibido enla paleta impresionista - Sargent le pedía en vano al que fue su maestro , Claude Monet, el color negro que éste sistemáticamente negaba-que es la expresión de la maestría alcanzada por Sorolla en estos años, así como de su verdadera devoción por la pintura de Veláquez. Damas de alta sociedad en su entorno habitual ,bellos bustos , muy belle époque , con grandes y elegantes sombreros , fueron temas muy agradables para la época .

Como ejemplos muy parecido a estos, citaremos el maravilloso lienzo de Frank Benson El sombrero negro de1904 , o los óleos y pasteles del pintor e ilustrador Paul Cesar Helleu ( 1859-1972 ) , aclamado por las damas de la sociedad y que tenía , entre sus más conocidas modelos a la Duquesa de Malborougho a la Condesa de Greffulhe.




Mercedes Tamara 
17 -10-2013


Bibliografía : Sorolla, Begoña Torres González , Edic Libsa

jueves, 10 de octubre de 2013

DOS SEVILLANAS JOAQUIN SOROLLA

DOS SEVILLANAS 1914



Dos Sevillanas
Óleo sobre lienzo 97 x 102,5 cm
Museo Sorolla, Madrid





Con voluntad de perpetuar un costumbrismo andalucista descontextualizado de la realidad histórica y social , está atento sólo a recoger la espuma de unas pretendidas esencias  tradicionales, sólidamente convertidas en tópico,no sólo de lo andaluz , sino de todo lo español. Ese tipismo no es más que un tributo a la moda del momento-costumbrista o si se quiere decir regionalista-que acaba ampliamente superado por la importancia de la ejecucción , resuelta con evidente maestría técnica.


El procedimiento, la técnica , registró en Sorolla unos cambios paralelos .El más significativo de todos ellos quizá fue el de la pincelada , que se tornó progresivamente más larga ,más ancha , más fluída y untuosa .pero también más matizada y con mayor capacidad de sutileza .


Este rasgo, común a varios pintores de la época , fue fruto de una sintesis de experiencias pictóricas contemporáneas y de la poderosa gravitación del menos es más " velázqueños ".
GITANA 1912
óleo sobre lienzo 110x 63,5 cm
Colección particular

Se reafirmó en el uso de los colores claros; el verde, el malva, el naranja y, por supuesto el blanco, un blanco que nunca era puro, pero siempre tomaba algo de los colores que le rodeaban . También en las calidades abocetadas y la presteza y fluidez de algunas pinceladas.


Su paleta se va haciendo cada vez más rica en matices . La profusa utilización de rosas y malvas anuncían lo  que será su obra  culminante - por lo que se refiere a la temática playera -; La bata rosa pintada en 1916.

Siente fascinación por la policromía de los tejidos , por el ropaje en sus diferentes calidades y, de manera especial , le  cautivan la piel y cabellos negros y sedosos. Sorolla se detiene en los aspectos de carácter plástico más llamativos de los personajes, como la caracterización de sus rasgos y carácter- con pretensiones eminentemente decorativas -la policromía viva de sus indumentarias . Todo ello le lleva a usar soluciones un tanto convencionales , aunque el resultado final no está exento de lirismo y una desenvoltura técnica conseguida a través de la siempre diestra mano del autor.


JOAQUINA LA GITANA 1914
óleo sobre lienzo 125,5x 81 cm
Museo Sorolla , Madrid




En este caso sitúa a sus dos personajes en un interior , aunque la luz solar no deja de penetrar en él, quizá a través de las cortinas  o persianas, dejando, a su paso, cegadores puntos de luz que parecen revolotear por el suelo de la estancia , posándose de forma caprichosa sobre la piel de las muchachas. Se encuentra bastante cerca de aquellas risueñas señoritas a contraluz que pintara el maestro Cecilio Pla , representante de un -pese a todo-despreocupado optimismo fin de siglo.

En ambos el luminismo será la nota fundamental, aunque entremezclada con ciertos rasgos  de tipo modernista, como el protagonismo femenino, el uso del color y el tipo de composición. En este sentido es difícil pasar por alto, por ejemplo, las similitudes con los lienzos de Julio Romero de Torres representaba, por las mismas fechas, muchachas vestidas de blanco a contraluz sobre fondo de patíos cordobeses fuertemente iluminados por el sol.



Mercedes Tamara 
10-10-2013



Bibliografía : Sorolla, Begoña Torres González , Edic Libsa



martes, 1 de octubre de 2013

CORDELEROS DE JÁVEA JOAQUIN SOROLLA

CORDELEROS DE JÁVEA  1898


Cordeleros de Jávea
óleo sobre lienzo 66x 96 cm
Madrid , Museo Sorolla




Esta tela fue realizada durante la segunda estancia en Jávea ( Alicante ) en la fecha verdaderamente emblemática para España de 1898. El período que el pintor pasa en esta tierra fue uno de los que generaron el ímpulso rápidisimo del pincel. Coincidió con la época en la que Sorolla sintió con  más fuerza el imperativo de detener el  transcurso del tiempo , de fijar el instante,en clara concordancia con los impresionistas.

Tuvo mucho que ver el deslumbramiento solar, que le hace intentar fijar en la tela cada rayo como si se tratara de una irrisacción. El propio Sorolla lo aclaró cuando decía :" Me sería imposible pintar despacio al aire libre . No hay nada inmóvil en  lo que nos rodea.  Pero, aunque todo estuviese petrificado y fijo , bastaría que se moviera el sol, lo que hace de continuo , para dar diversos aspectos a las cosas ".

En un primer vistazo el tema de este cuadro puede parecer que sigue la  estela del realismo, costumbrista o rural, : el duro trabajo, al aire libre de los cordeleros. Sin embargo,  una mirada más atenta nos indica el hecho deque el asunto es, como siempre un pretexto para recoger la plenitud solar , el movimiento de la luz en el espacio libre , en constante mutación , vibración y movilidad.


María en la playa 1898
óleo sobre lienzo 13x 23 cm

Colección particular






Es una visión vibrante y trémula , el pintor incorpora la figura y el paisaje y lo simplifica,tratándola como un elemento más, que guarda íntima conexión con la mancha. No hay búsqueda del detalle, sino que intenta apresar lo fugaz en un todo , a través del color, la luz y el movimiento.No ignora las figuras -sujeto evidente del cuadro-pero tampoco invierte todo el tiempo y esfuerzo  en ellas.Éstas quedan esbozadas ligeramente ,con rápidas pinceladas en las que parece no haber vacilaciones  .                                                     


Es un ejemplo claro de limpieza de paleta , de mayor libertad y soltura , donde los  brochazos se hacen más fluidos, menos forzados, consiguiendo captar la luz de  forma espontánea . Observamos un cambio radical en el color , al desterrar todos los ocres, marrones y grises, que, hasta entonces, había utilizado para interpretar el paisaje . Las manchas de color , los restregones arrastrando la pasta casí liquida, se llevan a cabo con un pincel ancho y veloz.

Los pigmentos , si bien al acercarnos al lienzo parecen entremezclados de forma desordenada, al contemplarlos a media distancia , se ordenan en volúmenes reales ante nuestra vista. A través del esfuerzo por alcanzar la verdad en la reproducciín de lo percibido, el artista ha sido capaz de desvelarnos su mundo, donde la pintura claramente , no es algo inerme,

Mercedes Tamara 
25 marzo 2012


Bibliografía : Sorolla, Begoña Torres González , Edic Libsa